MISA FAMILIAR XIV Tiempo Ordinario Ciclo A 1. MONICIÓN DE ENTRADA Buena/os tardes/días a todos. ¡Sed bienvenidos al encuentro con el Señor! Vivimos agobiados y aplastados por la tarea de cada día. Muchas veces vivimos como robots. Hacemos las cosas sin pensar. No nos queda un rato para dedicarlo al descanso, o a reflexionar. Jesús nos dice en el Evangelio de hoy: "Venid a mí, todos los que estáis cansados y agobiados que yo os aliviaré. Mi yugo es suave y mi carga ligera". Sin embargo, entre nosotros usamos otras expresiones: " El trabajo nos lleva todo el día". "Si queremos estar al día hay que estudiar o trabajar sin descanso, no podemos perder un minuto... "Nos faltan horas en el día para poder sacar adelante nuestras familias" "No queda un rato para nada y menos para pensar". En esta Celebración de hoy vamos a acercarnos a Dios con sencillez y con tranquilidad. Vamos a intentar pensar un poco en nuestras vidas y descansar un rato junto a Dios. Nos ponemos de pie y comenzamos esta eucaristía en este primer domingo del mes de julio cantando: Juntos como hermanos… 2. PENITENCIAL 2.1. Por las veces en que complicamos la vida de los demás y también la nuestra. Señor, ten piedad 2.2. Porque pensamos con frecuencia que la vida es principalmente riqueza y dinero, tener y no ser. Cristo, ten piedad. 2.3. Por los momentos en que no ayudamos a que los demás encuentren entre nosotros sosiego, paz y descanso. Señor, ten piedad 3. MONICION A LAS LECTURAS Las lecturas que vamos a escuchar nos muestran a un Jesús contento con los planes y los proyectos de Dios. Pero, para recibirlos, comprenderlos y llevarlos a la práctica, es necesario encontrar corazones limpios, sencillos y confiados con el Señor. Escuchemos con atención.
4. ORACION DE LOS FIELES. 4.1. Tengamos un recuerdo especial por el Papa Francisco. Que, en medio de un mundo que parece vivir de espaldas a Dios, siga anunciando con fuerza que la salvación está en Cristo, Hijo de Dios. Roguemos al Señor. 4.2. Por todos los problemas que sacuden a la humanidad. La inmigración, el desencanto, la desilusión, la depresión. Para que en la fe encontremos la mejor medicina. Roguemos al Señor. 4.3. Por los enfermos, los débiles, los niños y mujeres maltratadas, para que obtengan el apoyo y el consuelo de los hermanos. Roguemos al Señor. 4.4. Por los que viven montados en el dinero. Para que comprendan que, en la vida, no es más feliz quien más tiene sino quien vive con lo esencial. Roguemos al Señor. 4.5. Por los pobres. Por los que no tienen techo ni hogar. Por los más preferidos de Jesús. Para que tengan derecho a vivir mejor en un mundo donde hay pan y posibilidades para todos. Roguemos al Señor. 4.6. Por todos los que emprenden sus vacaciones, para que este tiempo de relax les ayude a cercarse a Dios. Roguemos al Señor. 4.7. Por los responsables mundiales de los temas económicos para que cese la explotación en todo el mundo y desaparezcan las causas que originan el hambre. Roguemos al Señor.
5. OFRENDAS 5.1. Con estas LLAVES queremos simbolizar las puertas cerradas de tantos corazones al Señor. Que la FE sea, también, una llave que nos ayude a sentir, vivir y celebrar de verdad a Jesús. 5.2. Con estos frascos: EUCARISTIA, ORACION Y DIOS, queremos simbolizar las grandes vitaminas que el hombre necesita para no cansarse de trabajar ni de vivir. 5.3. Con el pan y el vino queremos agradecer a Dios que se quedara para siempre en el altar. Que la Eucaristía sea para nosotros fuerza y aliento en el caminar.
6. ORACION Mientras nosotros queremos dárnoslas de entendidos, de expertos y de importantes... Tú nos hablas al corazón, nos susurras la verdad de la vida, de forma fácil de entender en todas las situaciones. Mientras nosotros nos complicamos la existencia dando vueltas y vueltas al ayer, al mañana y al hoy... Tú nos invitas a sumergirnos de lleno en el presente: A cada día, le basta su trajín. Mientras nosotros nos impacientamos, nos comprometemos en causas que nos ponen violentos... Tú nos recuerdas que la eficacia la conseguiremos tratándonos con mansedumbre y humildad de corazón. Mientras nosotros queremos aparentar o deslumbrar, por tener, ser, hacer o llegar... Tú acoges nuestras fragilidades e incoherencias y pasas por alto, perdonas nuestras prepotencias. Mientras nosotros queremos vivir la vida envueltos en tensiones, compromisos y chantajes... Tú no nos impones nada; sólo invitas, sugieres, propones... y nos susurras: SI QUIERES... Aquí me tienes, Señor, para hacer tu voluntad.